Conectividad con el Internet de las Cosas Industrial

22 de febrero de 2024 0

La cuarta revolución industrial, también conocida como Industria 4.0, lleva la tecnología a un nuevo nivel gracias a la interconexión a través del Internet de las Cosas (IoT), el acceso a datos en tiempo real y la implementación de sistemas ciberfísicos. La industria 4.0 integra dispositivos físicos y digitales, permitiendo una colaboración más estrecha entre trabajadores y departamentos, y obteniendo un control más preciso y un aumento en la productividad.

El Internet de las Cosas Industrial (IIoT), consiste en una red que integra sensores, dispositivos y sistemas autónomos conectados entre sí y a Internet dentro de entornos industriales como fábricas, empresas de energía y otros escenarios.

Esta interconexión permite la recopilación, transmisión y análisis de datos en tiempo real, lo que impulsa la automatización, la monitorización remota y la optimización de procesos industriales.

El Internet de las Cosas Industrial (IIoT) facilita la toma de decisiones informadas, mejora la eficiencia operativa, previene fallos y contribuye al desarrollo de productos y servicios más avanzados. Utiliza tecnologías como el aprendizaje automático, la computación en la nube, la computación en el borde y la movilidad para ofrecer soluciones innovadoras y transformar la manera en que se gestionan y operan las industrias.

Componentes de un sistema IoT

Para poder aplicar el Internet de las Cosas en la industria, hay que conocer los elementos que conforman su estructura:

  • Dispositivos inteligentes: son todos aquellos dispositivos, actuadores, controladores o sensores que se colocan en la base y recopilan datos, guardan información y la envían al lugar adecuado para procesarla.
  • Dispositivos de puerta de enlace (Gateway): En este caso, se encargan de conectar los sensores a la red, es decir, permiten la conexión entre dispositivos inteligentes y el resto de elementos mediante protocolos.
  • Cloud computing (nube): se encarga de procesar toda la información y los datos recopilados con los dispositivos para analizarlos y guardarlos en la nube, evitando pérdidas de datos.
  • Servidor local: es el software que conecta todos los componentes y forma el sistema IoT, y normalmente constituye el punto de acceso del usuario.

Ventajas y beneficios de la aplicación del IIoT en la industria 4.0

La aplicación del Internet de las Cosas Industrial (IIoT) ofrece una serie de ventajas significativas que impulsan la eficiencia operativa y la competitividad de las empresas. Entre estas ventajas se encuentran:

  • Mejora de la eficiencia operativa: El IIoT permite mejorar la calidad, eficiencia y producción de productos o servicios al facilitar la recopilación y análisis de datos en tiempo real. Esto optimiza los procesos y reduce los tiempos de inactividad, aumentando la productividad general de la operación.
  • Reducción de costos: Al aprovechar el IIoT, las empresas pueden reducir los costos de producción y mantenimiento al prevenir fallas y optimizar los procesos. Esto se traduce en un uso más eficiente de los recursos y una mayor rentabilidad para la organización.
  • Mejora de la satisfacción del cliente: La implementación del IIoT permite ofrecer aplicaciones nuevas y mejoradas que mejoran la experiencia del cliente. Esto incluye productos más confiables y servicios más personalizados que satisfacen las necesidades y expectativas del cliente de manera más efectiva.
  • Reducción de riesgos: El IIoT ayuda a reducir los riesgos al detectar fallos de manera temprana y mejorar la gestión del mantenimiento. Esto minimiza los tiempos de inactividad no planificados y garantiza la continuidad de la operación.

Además de estas ventajas principales, el IIoT también ofrece varios beneficios para el sector industrial:

  • Toma de decisiones rápida y sustentada: La información generada por el IIoT proporciona una base sólida para la toma de decisiones comerciales, permitiendo identificar oportunidades de mejora y responder rápidamente a los cambios en el entorno empresarial.
  • Mantenimiento predictivo y preventivo: El análisis de datos recopilados a través de sensores permite anticipar fallas en equipos y sistemas, evitando costosos tiempos de inactividad y optimizando la planificación del mantenimiento.
  • Incremento de la calidad: Los sensores pueden detectar desviaciones en factores críticos de calidad, permitiendo una intervención rápida para mantener los estándares de calidad deseables y evitar productos defectuosos.
  • Aumento de la eficiencia energética: El IIoT permite monitorizar y optimizar el consumo de energía en tiempo real, identificando áreas de ineficiencia y facilitando la implementación de medidas correctivas.
  • Adopción de modelos de producción Just-in-Time (JIT): El IIoT proporciona datos en tiempo real sobre la capacidad de fabricación, la demanda del mercado y otros factores relevantes, permitiendo una producción más ágil y eficiente.
  • Mejora de la seguridad industrial: Mediante la monitorización de datos relacionados con la seguridad informática y la seguridad y salud de los trabajadores, el IIoT ayuda a prevenir accidentes y garantizar un entorno de trabajo seguro.
Infografía Internet de las Cosas
Redacción
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