Solo el 35% de mujeres estudian carreras STEM – Entrevista a Jorgina Díaz y Carlos Méndez
- En campos como la ingeniería y la tecnología, la presencia femenina en España representa apenas el 18,3%, mientras que en otros como el de la informática cae a un preocupante 12%.
- La presencia femenina en la robótica y la automatización no es solo una cuestión de equidad, sino una necesidad para construir un futuro tecnológico más diverso e innovador.
Pese al evidente avance de la tecnología y la creciente digitalización de la industria, la desigualdad de género sigue siendo un desafío persistente en el sector de la robótica y la automatización.
La participación femenina en carreras STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) es aún baja, y esta brecha se amplía cuando se observa la representación de mujeres en posiciones de liderazgo dentro del ámbito tecnológico. Y es que, a pesar de los esfuerzos por fomentar la inclusión, el progreso ha sido lento, y en algunos casos, incluso se ha observado un retroceso en la matriculación de mujeres en estudios tecnológicos.
Las razones de esta brecha son complejas y multifactoriales. Desde la infancia, los estereotipos de género juegan un papel determinante en la percepción de las carreras tecnológicas, donde la falta de referentes femeninos visibles desanima a muchas niñas a explorar estos campos.
En el ámbito laboral, la falta de oportunidades de ascenso, la brecha salarial y la dificultad de conciliación entre la vida profesional y personal siguen siendo obstáculos significativos para muchas mujeres. Además, el predominio de entornos laborales masculinizados ha perpetuado la escasa participación femenina en sectores clave como la robótica y la automatización.
Para analizar esta realidad y proponer soluciones, entrevistamos a Jorgina Díaz, presidenta de HispaRob, y Carlos Méndez, presidente de AER Automation.
Jorgina Díaz, ingeniera en telecomunicaciones, cuenta con experiencia en empresas como Vodafone y Alisys Digital, y en 2023 fue reconocida por la Asociación de Women in Robotics como una de las 50 mujeres en robótica que deberías conocer. Por su parte, Carlos Méndez, ingeniero mecánico y PDG por el IESE, ha ocupado diversos cargos en Aritex desde 2001 siendo actualmente el Chief Sales Officer y, hace 1 año, fue elegido presidente AER Automation. A su vez, es presidente de Advanced Factories, la feria del sector más representativa en España.
La aparentemente insondable brecha de género en la industria tecnológica
Las cifras reflejan una preocupante falta de presencia femenina en ingenierías y tecnologías. Según la Organización Internacional del Trabajo, solo el 35% de las mujeres a nivel mundial estudian carreras STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas), incluyendo en este porcentaje las carreras de ciencias de la salud. En campos como la ingeniería y la tecnología, la presencia femenina en España representa apenas el 18,3%, mientras que en otros como el de la informática cae a un preocupante 12%.
«La brecha de género en la participación de la mujer en la industria es alarmante. Sin modelos femeninos visibles, es difícil que las nuevas generaciones se animen a entrar en el sector«, enfatiza Jorgina Díaz. «La industria se ha visto tradicionalmente como un sector masculino. Si en la universidad la cantidad de mujeres en ingeniería es baja, su presencia en la empresa seguirá siendo insuficiente para tener un sector más equilibrado«, coincide Carlos Méndez en su tesis de que el problema se origina desde la infancia.
Uno de los principales desafíos es el acceso temprano a la formación en robótica y tecnología. «Es crucial que las niñas vean que pueden ser parte de este mundo. La robótica no es solo para hombres. La diversidad aporta innovación, creatividad y una visión más amplia del futuro tecnológico», destaca Jorgina.
Sin embargo, también advierte de una preocupante tendencia al estancamiento: «Hemos conseguido más visibilidad y se han roto muchos techos de cristal, pero hay cierta sensación de que estamos frenando o incluso retrocediendo«. Respaldando su percepción con datos, señala que «según el Observatorio de Mujeres de Innovación del Ministerio de Ciencia, solo uno de cada tres puestos en empresas está ocupado por mujeres, y en entornos de innovación, el porcentaje baja al 28%». Además, menciona que «el 61% de las empresas tecnológicas no tiene mujeres TIC especialistas en tecnología, lo que demuestra que aún queda mucho por hacer».
Iniciativas y proyectos para fomentar la igualdad
Tanto HispaRob como AER Automation han puesto en marcha diversas iniciativas para fomentar la participación femenina en el sector. En el caso de HispaRob, el grupo temático de robótica educativa trabaja activamente en el fomento de vocaciones STEM entre niñas y adolescentes.
Una de sus acciones destacadas es su colaboración con la feria AEMENER de carreras STEM, que se celebra en la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Minas y Energía de la Universidad Politécnica de Madrid. Allí, ofrecen talleres para inspirar y motivar a jóvenes estudiantes, con especial énfasis en el talento femenino. Además, han firmado acuerdos con instituciones educativas para introducir la robótica en colegios y han participado en la celebración del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia.
Por su parte, AER Automation también impulsa proyectos para visibilizar a las mujeres en el sector. En su última asamblea, se logró una mayor representación femenina en su junta directiva, con dos mujeres elegidas con un respaldo significativo. Además, han desarrollado el proyecto MoonGirl, con el objetivo de fomentar la presencia femenina en la industria.
En el Vigo Industry Summit, organizaron una mesa redonda con directivas de grandes empresas para compartir sus experiencias desde una perspectiva profesional y no únicamente reivindicativa. También trabajan activamente en programas educativos para atraer talento joven a la robótica y automatización, conscientes de que el sector necesita más profesionales en general, y más mujeres en particular.
Desafíos en el ámbito laboral: la responsabilidad de las empresas
A la hora de analizar aquellas barreras que dificultan el acceso de las mujeres a puestos de liderazgo en la industria, según Jorgina, «nos enfrentamos a falta de oportunidades de ascenso, estereotipos sobre el liderazgo femenino y dificultades en la conciliación laboral». Resaltando también la necesidad de crear redes de mentoría y apoyo para acompañar a las mujeres en su desarrollo profesional.
«Yo ahora estoy haciendo mentoring a chicas jóvenes para orientarlas en carreras tecnológicas. Es fundamental que construyamos comunidades de mujeres en este ámbito para compartir experiencias y apoyarnos mutuamente».
Carlos Méndez coincide en que «las empresas tienen un rol clave para fomentar la inclusión. No se trata solo de contratar más mujeres, sino de garantizar equidad salarial, promover el liderazgo femenino y eliminar sesgos en los procesos de selección«. Además, insiste en que «las compañías deben abrirse a la sociedad, participar en eventos educativos y mostrar cómo es realmente el sector para atraer talento diverso».
«Muchas veces el problema no es solo la cantidad de horas que trabajas, sino la rigidez de los horarios. La tecnología permite a las empresas ser más flexibles sin perder productividad», explica Méndez. «Medidas como la baja paternal igualitaria ayudan a romper los roles de género, porque facilitan la conciliación para todos y eliminan barreras artificiales en la carrera profesional de las mujeres».
Desafíos y oportunidades en el futuro industrial
A pesar de los avances, Díaz insiste en que «no podemos conformarnos. Nos hemos acostumbrado a ver algunas mujeres en altos cargos y creemos que el problema está resuelto, pero seguimos siendo una minoría. Hay que seguir luchando». En la misma línea, subraya la importancia de la educación temprana en tecnología y menciona iniciativas como el programa Girls Who Code o Woman in Engineering, que, aunque han tenido un gran impacto, todavía queda trabajo por lograr en el acceso de las mujeres a carreras STEM.
Por su parte, Carlos se muestra más optimista sobre el futuro: «La sociedad evoluciona constantemente. Hoy en día el panorama es muy diferente al de hace 20 años, y en los próximos 10 años veremos avances aún mayores. No hay que tomar decisiones basadas solo en cómo es la realidad ahora, porque las barreras de hoy serán menores en el futuro».
Jorgina anima a las jóvenes interesadas en la tecnología a dar el paso sin miedo: «La robótica, la automatización y la inteligencia artificial son los pilares del futuro. Las mujeres no solo debemos ser usuarias de esta tecnología, sino también creadoras. Debemos estar presentes en todo el ciclo de vida de estos proyectos, desde el diseño hasta la implementación».
Méndez, por su parte, subraya la importancia de la participación activa: «Si tienes interés en la tecnología, no te pongas límites. La tecnología es objetiva y reconoce el talento. Participar en empresas tecnológicas e industriales es posible para cualquier persona con las capacidades adecuadas. Y, sobre todo, recuerda que tu presencia hoy facilitará el camino para las siguientes generaciones».
